«Mi lerdismo de principios del blogueo no llegaba a conocer el paradero de eso que es Exportar entradas así que van a ver todas las primeras de este blog (que pertenecen a anteriores bitácoras remontadas a una selección desde 2008) con las mismas fechas y, por ende, con este cartelito testigo de mi ignorancia… En el pecado llevas pues la penitencia. Mea culpa. A sus pies»
No sólo tienes el derecho a equivocarte, tienes la obligación.
Y nadie puede usurparte la experiencia de hacerlo.
Porque es en esos momentos horrendos de errores tremebundos, momentos en los que te caes de verdaderos precipicios, esos en que la vida da «hostias como panes»… en los que aprendes en toda la dimensión que esa palabra tiene.
Nunca, nadie, te podrá traspasar un conocimiento como cuando lo experimemtas dentro.
Nunca lo olvidas, su estela te acompaña (en algunos casos incluso te atormenta).
Pero es gracias a él que creces, ensanchas tu visión del mundo, te enteras de que el alma se puede expandir.
Espero que hayamos aprendido de los errores del caduco 2009 y seamos capaces de aplicarlo pasado mañana… al fin y al cabo no todos los días se estrena una década.
Bienvenidos a los maravillosos años 10…
(Entrada del antiguo Blog: 31·diciembre·2009)
